Descripción

La ruta en piragua Tortosa-Amposta empieza cuando el Ebro se despide del Mont Caro, vigía de Els Ports, testimonio omnipresente del paso de pueblos y culturas. Desde que Túbal, nieto de Noé, se arrodilló a sus pies para pedir protección en su ascensión por la indomable cuenca de un río que después daría nombre a una gran península.

Como una gran serpiente indecisa, de escamas plateadas, dibujando los últimos remolinos de vida entre Campredo y el llano de la Galera, busca la compañía de alguien importante, como el Montsià, para no sentirse solo cuando acaba el viaje.

Se cree que Carrova viene del conjunto formado por dos barcas amarradas a una cuerda conductora. Se cree también que estos amarradores eran defendidos por unas torres.
Esta cuerda estaba dispuesta de forma que las embarcaciones fluviales pudieran pasar por debajo. Estos pasos coinciden con la vía pública y son de una antigüedad notoria.